Las letras que aquí, escribí.

Intranquila por rememorar todo aquello que en las últimas 1443 lunas plasme, cada línea revivió momentos manifestados que no contemple. 

Es increíble todo se transforma, de aquella apasionada e intrépida fase solo quedan destellos. 
Con melancolía y asombro recuerdo esas noches llena de alegría, lágrimas y tal vez incredulidad en las que me visitaba la musa.  
 
Como si trajera un regalo que aliviará. 
De aquello solo queda una certeza, cuantos al igual que yo notaron su propósito, que jugarreta del destino, que casualidad más graciosa y peligrosa. 
 


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